Los jugones de cualquier nivel encontrarán en estos microauriculares para PC el perfecto complemento para disfrutar de sus partidas durante horas bajo la máxima comodidad y con un realismo sonoro sin precedentes.
Con un diseño circumaural cerrado y abierto, respectivamente, G4ME™ ZERO y G4ME™ ONE integran en el micrófono la mejor tecnología de cancelación de ruido, consiguiendo conversaciones de gran claridad durante el juego.
Sennheiser, compañía especializada en soluciones de sonido y comunicación, presenta sus nuevos auriculares destinados a gamers: G4ME™ ZERO y G4ME™ ONE.
Con la colaboración de Io Interactive, uno de los desarrolladores de juegos más importantes del mundo, la firma ha creado estos auriculares de última generación que permiten conseguir una ambientación sin igual y una colocación del rival con total exactitud.
Dos modelos con los que cualquier jugador podrá disfrutar de un sonido profundo y preciso, una ergonomía máxima a prueba de largas partidas y la mejor tecnología de cancelación de ruido integrada en el micrófono para asegurar una comunicación clara durante el juego.
La importancia del audio en los juegos
G4ME™ ZERO y G4ME™ ONE disponen de una serie de prestaciones para que los gamers disfruten de los juegos con un sonido nítido y preciso. Así, por ejemplo, integran la tecnología de transductores original de la firma, que permite conseguir escuchar todos los detalles de los juegos bajo una impresionante claridad de sonido.
Además, integran un micrófono con tecnología de cancelación de ruido para que cualquier conversación se transmita nítida y sin interferencias, independientemente del ambiente que rodee al usuario. Además, el brazo del micrófono se puede ajustar a gusto del jugador e, incluso, es posible silenciarlo con tan sólo situarlo en posición vertical.
Y si el usuario desea descansar tras una partida, puede emplear sus microauriculares para escuchar música con gran calidad, así como interrumpir el sonido gracias a su botón “mute” o controlar el volumen cómodamente mediante el mando situado en la cápsula derecha.
Mayor comodidad para las misiones más largas
Con un atractivo acabado en blanco y rojo, estos nuevos microauriculares presentan un diseño ligero y aseguran la máxima comodidad, ya que, tanto la diadema como las cápsulas de tamaño extra grande están protegidas en su parte interior con material acolchado.
Y para guardarlos, su diadema dispone de un mecanismo que permite plegarla y ha sido realizada con materiales de máxima calidad y resistencia, lo que garantiza una perfecta movilidad y una gran duración.
Por otra parte, se comercializan con un extenso cable trenzado de tres metros para aportar una mayor libertad de movimientos, una gran durabilidad y poder decir adiós a los enredos.
G4ME™ ZERO, para jugones profesionales
En concreto y especialmente desarrollados para los gamers profesionales más exigentes, G4ME™ ZERO cuenta con un diseño circumaural cerrado. Característica que le diferencia del otro modelo presentado y que permite al usuario aislarse de manera pasiva del ruido de fondo. Asimismo, sus almohadillas han sido fabricadas con una doble capa de espuma viscoelástica y piel sintética para garantizar el mejor sellado acústico y el máximo confort.
En cuanto a características técnicas, ofrecen una respuesta de frecuencia amplísima que abarca desde 10 hasta 26.000 Hz y un nivel de presión de sonido de 108 decibelios, así como una impedancia de 150 ohmios.
G4ME™ ZERO se acompaña de una atractiva funda en color negro donde almacenar y transportar los microauriculares cuando no se utilizan.
G4ME™ ONE, máximo rendimiento
Por su parte, G4ME™ ONE han sido concebidos para ser los auriculares definitivos de los gamers que disfrutan de sus juegos en el PC de casa, ofreciendo un sonido de alta fidelidad gracias a su diseño y componentes.
Así, disponen de un peso de tan sólo 300 gr y un diseño circumaural abierto, por lo que es posible estar conectado continuamente con el entorno, incluso cuando se está inmerso en un juego intenso.
Como prestaciones, destaca por ofrecer una gran respuesta de frecuencia que oscila entre 15 y 28.000 Hz y un nivel de presión del sonido de 116 decibelios, a lo que suma una impedancia de 50 ohmios.
